La protección pasiva contra incendios comprende todos aquellos materiales, sistemas y técnicas, diseñados para prevenir la aparición de un incendio, impedir o retrasar su propagación, y facilitar por último su extinción.

Dependiendo el objetivo que se pretende proteger podríamos clasificar distintos métodos para ejecutar la protección pasiva contra incendios en los siguientes:

• Protección de estructuras
• Sellado de penetraciones
• Compartimentación
• Emisión de agua por medio de aspersores

Protección de estructuras

No es más que proteger las estructuras de una construcción contra posibles incendios.

Las estructuras metálicas usadas con frecuencia para el soporte de las cargas de los edificios presentan el inconveniente de la disminución de su resistencia mecánica, debido a la rapidez con que incrementan su temperatura cuando están en contacto con un foco de calor. Mediante la aplicación de pinturas intumescentes, morteros, paneles de silicato, etc, se consigue evitar la pérdida de estabilidad por la disminución de la resistencia mecánica. Aún así la elección de la solución idónea pasa por el conocimiento de los factores así como éstos pueden llegar a influir a la estructura ante la acción de un incendio.

Sellado de penetraciones

Gracias al uso de materiales especiales resistentes al fuego, como pueden ser pinturas, ladrillos, collarines, almohadillas intumescentes, rejillas de ventilación, etc. se logra la contención del posible incendio evitándose así su propagación por los conductos que atraviesan los muros del recinto a proteger.

En la actualidad, prácticamente todos los edificios tienen numerosas instalaciones atravesando diversos sectores y elementos de compartimentación, especialmente en edificios inteligentes y plantas de fabricación, y como no en edificios de viviendas y superficies comerciales, etc., donde existen huecos que dan paso a las diversas instalaciones y que comprometen seriamente la compartimentación de las diferentes zonas, que además favorecen la propagación del fuego, humos y gases en caso de incendio. En consecuencia debe preverse el sellado estanco de estos huecos con los materiales especialmente adecuados para ello.

 

Compartimentación

Los elementos de sectorización y compartimentación, tales como tabiques, muros, mamparas, puertas cortafuegos, etc., forman parte de la compartimentación del edificio o recinto. Dichos elementos  presentan ciertas capacidades de resistencia al fuego, las conocidas RF. Las RF suelen ir acompañadas de un número el cual indica los minutos capaces de compartimentar el lugar del incendio. Por ejemplo si se instala una puerta cortafuego de RF60 este quiere decir que ésta tiene una resistencia al fuego equivalente a 60 minutos, después de los cuales el riesgo de propagación del incendio, a otros compartimentos o sectores, a través de ésta es casi inminente.

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